NOCHES, DÍAS DE ESPLENDOR

Vivo en un mundo que desconozco, con gente que me es extraña, en una ciudad que no es mía.
Camino por un carril que no repito, a pesar de trazarlo cada mañana;
a pesar de las distintas poses, la mirada es siempre fría.
Pestaña amarilla.
Gracias nunca fueron consuelo, como mucho a la monarquía,
pero no soy yo bufón, ni anhelo (se ve),
mañana seguramente será otro puto día.


No hay comentarios:

Publicar un comentario